rear”
y podemos materializar nuestra propia realidad, esta gema ayudará a
trabajar con el rol de sometimiento y con las actitudes de vivir
callando por temor a ser impulsivos o por no saber poner límites, la
Adularia les enseña a plantear cada cosa a su tiempo, evitando actitudes
impetuosas y destructivas. Todo ello con el fin de liberarnos del
Querer Ser y pasar a SER.
La Piedra Luna trabaja con el arquetipo de la Templanza, sacando a la luz emociones como la moderación, paciencia, adaptabilidad, armonía, compatibilidad, trabajando la imagen paterna y materna e inspirando confianza en uno mismo y en los demás. Esta confianza, potencia la decisión de cambio que cada uno siente en lo más profundo de su Ser, dejando atrás los condicionamientos y temores que nos impiden avanzar.
Es de una poderosa ayuda para trabajar los miedos y aquellos episodios de nuestra vida que hemos tratado de olvidar, pues actúa trayéndolos a la mente consciente para poder así superarlos desde otra perspectiva, desde una realidad más amplia y, aprender de esa experiencia re-codificando ese patrón energético.
La Piedra Luna está relacionada con el chacra Cardíaco, está vinculada con patologías cardíacas y circulatorias, así como con las emociones más profundas del ser: La Compasión y El Amor Incondicional. Como esta piedra está llena de energía pasiva y femenina, aumenta las ganas de exteriorizar las emociones en lugar de esconder el verdadero YO y de darse permiso para seguir los deseos del corazón.
Esta maravillosa piedra, actúa también sobre el chacra Laríngeo, trabajando sobre el sistema respiratorio y la glándula tiroides, ayudando a expresarnos emocionalmente ante cualquier situación e interlocutor, aún cuando éste seamos nosotros mismos.
Al trabajar sobre el meridiano del Intestino Delgado, al que le corresponde el elemento fuego, se asocia a la Piedra Luna la posibilidad de asimilación de los nutrientes, entre los cuales figura el Amor, que como sabemos, es la Fuerza Creativa del Universo. También corresponde emocionalmente a estados de confusión mental, donde no hay claridad para definir qué es lo más apropiado para uno mismo, cuál es nuestro camino, cómo conseguir el propósito de nuestra Alma en esta existencia…
Las energías de esta gema también se relacionan con el meridiano de Estómago, el cual, se vincula con la ambición y con la incapacidad de digerir situaciones de nuestra vida. Por sus propiedades, equilibra y ayuda en los nuevos comienzos y para ello abre camino a la información enviada desde el subconsciente, potencia la intuición y ayuda en el trabajo interior para así, transmutar esas situaciones y pasar el reto con una sonrisa.
Un apunte más…
Sagrada para todas las diosas de la luna, la Piedra Luna es un precioso cristal femenino. Al estar relacionado con la luna y el cielo nocturno, se dice que bajo la almohada asegura un descanso reparador. También sirve como talismán de la fertilidad, por lo que las mujeres árabes solían coserla en sus ropas para quedarse embarazadas. Este cristal sigue los ciclos de la luna y se dice, que ayuda a equilibrar la menstruación y alivia los síntomas premenstruales.
La Piedra Luna trabaja con el arquetipo de la Templanza, sacando a la luz emociones como la moderación, paciencia, adaptabilidad, armonía, compatibilidad, trabajando la imagen paterna y materna e inspirando confianza en uno mismo y en los demás. Esta confianza, potencia la decisión de cambio que cada uno siente en lo más profundo de su Ser, dejando atrás los condicionamientos y temores que nos impiden avanzar.
Es de una poderosa ayuda para trabajar los miedos y aquellos episodios de nuestra vida que hemos tratado de olvidar, pues actúa trayéndolos a la mente consciente para poder así superarlos desde otra perspectiva, desde una realidad más amplia y, aprender de esa experiencia re-codificando ese patrón energético.
La Piedra Luna está relacionada con el chacra Cardíaco, está vinculada con patologías cardíacas y circulatorias, así como con las emociones más profundas del ser: La Compasión y El Amor Incondicional. Como esta piedra está llena de energía pasiva y femenina, aumenta las ganas de exteriorizar las emociones en lugar de esconder el verdadero YO y de darse permiso para seguir los deseos del corazón.
Esta maravillosa piedra, actúa también sobre el chacra Laríngeo, trabajando sobre el sistema respiratorio y la glándula tiroides, ayudando a expresarnos emocionalmente ante cualquier situación e interlocutor, aún cuando éste seamos nosotros mismos.
Al trabajar sobre el meridiano del Intestino Delgado, al que le corresponde el elemento fuego, se asocia a la Piedra Luna la posibilidad de asimilación de los nutrientes, entre los cuales figura el Amor, que como sabemos, es la Fuerza Creativa del Universo. También corresponde emocionalmente a estados de confusión mental, donde no hay claridad para definir qué es lo más apropiado para uno mismo, cuál es nuestro camino, cómo conseguir el propósito de nuestra Alma en esta existencia…
Las energías de esta gema también se relacionan con el meridiano de Estómago, el cual, se vincula con la ambición y con la incapacidad de digerir situaciones de nuestra vida. Por sus propiedades, equilibra y ayuda en los nuevos comienzos y para ello abre camino a la información enviada desde el subconsciente, potencia la intuición y ayuda en el trabajo interior para así, transmutar esas situaciones y pasar el reto con una sonrisa.
Un apunte más…
Sagrada para todas las diosas de la luna, la Piedra Luna es un precioso cristal femenino. Al estar relacionado con la luna y el cielo nocturno, se dice que bajo la almohada asegura un descanso reparador. También sirve como talismán de la fertilidad, por lo que las mujeres árabes solían coserla en sus ropas para quedarse embarazadas. Este cristal sigue los ciclos de la luna y se dice, que ayuda a equilibrar la menstruación y alivia los síntomas premenstruales.
SIBILA.